Credo oración
El Credo oración, se recita en las liturgias cristianas, esta debe decirse en cada misa, porque con ella, los cristianos reafirman su fe en Dios y sus creencias. Esta se comenzó a utilizar desde el siglo V por los católicos romanos, los protestantes y los ortodoxos.
Cuando esta oración se dice se establece un compromiso de palabra, ya que la palabra Credo significa que se cree en Dios por sobre todas las cosas, en la Iglesia, y confirmar la fe en ella y en lo que esta escrito en la Biblia.
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¿Cómo se recita el credo oración?
Esta oración se recita de acuerdo con los lineamientos de la Iglesia a la que se asista, puede hacerse el Credo Apostólico o Símbolo Apostólico, Credo Niceno o Símbolo Constantinopolitano. Se debe decir después del evangelio en la homilía, los domingos y en solemnidades, y en la celebración eucarística.
Cuando se va a comenzar decir el credo oración debe hacerse siempre de pie, debido a que es una oración de victoria la cual contiene el compendio de nuestra fe, con ella se han vencido los males terrenales. Se reza de pie con el propósito de mostrar con ella nuestros deseos de defender y propagar la fe católica.
Esta oración represente a una comunidad de fe, que proclama abiertamente sus creencias y de esta forma se realiza la unión con los cristianos en el pasado, presente y futuro.
Credo Apostólico o Símbolo Apostólico
Creo en Dios, Padre Todopoderoso, tú que eres el creador del cielo y la tierra.
Creo en Jesucristo, que es su único Hijo, Nuestro Señor, que fue concebido por obra y gracia del Espíritu Santo, nació de la Virgen Santa María; padeció bajo el mando de Poncio Pilato,
Lo crucificaron, murió y fue sepultado, descendió a los infiernos y resucitó al tercer día de entre los muertos, subió a los cielos y se halla sentado en la derecha de Dios, Nuestro Padre eterno.
Desde donde vendrá a juzgar a vivos y muertos para perdónale sus pecados, para que sean llevados a la vida eterna.
Creo en el Espíritu Santo, en la santa Iglesia católica, apostólica y romana, en la comunión de los santos, el perdón de los pecados, la resurrección de la carne y la vida eterna.
Credo Niceno o Símbolo Constantinopolitano
Creo que solo hay un Dios, que es el Padre todopoderoso y eterno, que fue el que creo el cielo y de la tierra, lo que se puede ver y lo que no se puede ver. Creo en solo un Señor, Jesucristo, el Hijo único de Dios, que nació del Padre primero que todos los siglos: el Dios de Dios, Luz de Luz, Dios verdadero de Dios verdadero.
Fue engendrado de la naturaleza del Padre, el que ha hecho todo, no fue creado; descendió del cielo con el propósito de salvarnos a nosotros lo hombres. Por obra y gracia del Espíritu Santo se encarnó en María, siempre Virgen, se hizo hombre; y por culpa nuestra fue crucificado en el poder de Poncio Pilato.
Sufrió y fue sepultado, al tercer día resucito, según lo dice las Escrituras, y subió al cielo, para sentarse a la derecha del Padre; va venir nuevamente con gloria con la finalidad de juzgar a vivos y muertos, y su reino nunca terminara.
Creo en el Espíritu Santo, Señor que da vida, proviene del Padre y del Hijo, en unión con el Padre y el Hijo recibe la misma bendición y gloria, y habló por los profetas.
Creo en la Iglesia, santa, católica y apostólica. Certifico que solo hay un bautismo para el perdón de los pecados. En espera que resuciten los muertos y por la vida por venir.